¿Y al final para que hice y hago todo?

Al final no importa que tanto cambie, que tanto cambie las cosas por ustedes, si al final solo importa lo que en ese momento crees que es lo mejor, al final no estas acostumbrada a esforzarte por nada, ni siquiera por ti misma, ahora si bien es cierto que tuve una buen aparte de la culpa, también es cierto que tú también tuviste la culpa de las cosas que a ti te correspondían, no solo yo fui culpable y no solo yo tengo que cambiar, pero ¿cómo vas a admitirlo? ¿Cómo tu hija de… nieta de… vas a admitir que has vivido de una forma cómoda toda tu vida?, y ahora que por fin tienes lo que toda tu vida quisiste, una familia un hijo un esposo, simplemente no quieres esforzarte ni tantito para que esa familia, esa hija y ese esposo san felices, no quieres ni pretendes cambiar, porque al final de cuentas no tienes esa necesidad, si al final de cuentas vas a tener a tus padres, hermanos y tíos y tías que te cumplirán todos y cada uno de tus caprichos.

¿Que soy yo para ti?, ¿Qué fui para ti?, no me importa que hallas hecho o sido o de quien antes de mí, me importa lo que haces y eres conmigo, pero si es cierto, yo tampoco supe apreciarte, aceptarte con todas tus virtudes y todos tus defectos, pero no quise cambiarte, no desee a otra persona solo quería que entendieras que todo eso a lo que estas acostumbrada seria solo cuestión de tiempo para que te lo pudiera dar, apoyo era y es lo que necesito para explotar todo mi potencial, pero si aparte de ser proveedor económico, afectuoso de mi hija y esposa tengo que serlo de una adolescente en cuerpo de mujer, no se puede, no puedo explotar todo mi potencial ni a la velocidad que se necesita, eso no lo ves, eso no tiene importancia en tu mundo, porque jamás tuviste que ver a tu padre hacer esos sacrificios, el los hacia como todo padre, pero tú no lo viste porque estabas entretenida en cosas más importantes de tu edad, ahora que aun sabiendo que yo era de un carácter muy muy similar al de tu padre, te arrepientes de estar con alguien así, uno y otro nos escogimos como nuestro complemento, yo acepto que tu vida social no murió, pero tu vida social no nos ha dado de desayunar, comer y cenar cada día de nuestro matrimonio, ahora te arrepientes de estar con alguien que efectivamente cambio en cuanto supo que iba a ser padre, que cambio a un ser en extremo responsable para sacar adelante a esa familia que acababa de formarse, no es que estés mal o que seas mala persona, solo que nunca viste todo lo que realmente hay que hacer para tener la familia feliz en la que tu viviste, y yo, no se vivir de otra manera que no sea esforzándome y porque no huevonenado cuando se requiere para conseguir lo que quiero, al final, ninguno de los dos quiso voltear un instante y tratar de entender la visión de la vida del otro.

Los dos somos culpables de eso, de ser tercos como mulas y egoístas como armiños, ahora esto se tambalea en unos cimientos de ilusiones forjadas al momento, nada real, solo ilusiones y creencias de cada uno de lo que una familia debe de ser, al final nuestra hija pagara esto y con justa razón nos recriminara en el futuro nuestra estupidez como padres.